Un encuentro...
... dos horas
y arrebol en mis mejillas.
Mi voz
inmantada a tu boca
insinúa y te saborea...
... no a borbotones,
sino destilándote.
Fuiste orfebre de mi alma;
hoy, aleación de mis suspiros.
A partir de hoy te obsequio con un blog "des(es)crito". Sin saber a qué me atengo te intuyo. Lee hasta hacerlo sólo tuyo. Te deleito con mi cierta alquimia de la nada para entregarte una parte de mí aunque incompleta… ¡Bienvenido!
3 comentarios:
Caray. Lo de la "aleación de mis suspiros" me ha dejado sin aliento. Y mira que ya se me estaba yendo el aire anteriormente de tanto retener la respiración por mirar este blanco fondo negro.
Besos, es estupendo.
Ángeles Fernangómez
Tú sí que eres estupenda...
El paso de orfebre a aleación. Una metamorfosis maravillosa. El creador convertido en lo creado. Es una imagen estupenda. Es un poema... de los que no se olvidan.
Publicar un comentario