martes, 16 de marzo de 2010

Micro- Silberia I

Fue en uno de esos minutos en los que la tarde se vuelve más tímida.
Las bacterias se morían despacio, sin hacer ruido. El cáncer iba remitiendo. Me sentía mejor. Es más, creo que, desde entonces, es la vida quien se folla a la muerte.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué bien, te felicito, espero que la próxima vez tu historia se transforme en una certeza.

Jara Silberia dijo...

Gracias anónimo!